Solicitamos la inclusión prioritaria como Zona de paz a la Eco Región Sierra Nevada y Serranía del Perijá. Ley 418 de 1997 o Ley de Orden Público.

Desde la Plataforma de Defensores de Derechos Humanos, ambientalistas y lideres sociales de la Sierra Nevada – PDHAL y Lideres y lideresas de organizaciones sociales de la Eco-Región Sierra Nevada, nos permitimos comunicarle a los Honorables Senadores de la Republica: Iván Cepeda Castros, Gustavo Bolívar Moreno, Roy Barreras Montealegre, Angélica Lozano Correa, Aida Avella Esquivel, lo siguiente:

Como organizaciones sociales respaldamos el proyecto de ley por medio del cual se define la política de paz del Estado a través de las adiciones, modificaciones y prorrogas de las disposiciones contenidas en la Ley 418 de 1997, consideramos un acierto avanzar en la búsqueda de una paz total que permita la plena vigencia del Estado Social de Derecho en nuestro país. Consideramos que la Eco-región Sierra nevada de Santa Marta- Serranía del Perijá, zona incluida dentro de los PDET., debe ser priorizada como una de las 9 regiones de paz anunciadas por el gobierno nacional. A continuación, expresamos nuestras razones:

  1. La desmovilización paramilitar (2006) marcó un hito. El Acuerdo de Paz (2018) trajo la oportunidad de pensar en un nuevo país. Entendimos, desde las organizaciones sociales, las minorías y los liderazgos comunitarios, que había una oportunidad importante, porque pese a que en esta Eco-región el paramilitarismo no desapareció, la puesta en marcha del Acuerdo de Paz si nos permitía devolverle dignidad a las comunidades rurales que altamente fueron violentadas y seguían siendo violentadas. Sin embargo, el gobierno que antecedió cerró toda posibilidad de participación; en la Guajira, la inestabilidad política ha hecho que en un periodo de 8 años donde normalmente debieron pasar dos gobernadores, han pasado 12 y en el Cesar, las elites asociadas al paramilitarismo siguieron hostigado la acción comunitaria y social. En el Magdalena la participación es incluyente, siempre y cuando se siga una línea y un solo liderazgo.
  2. Los grupos armados tipo paramilitar han cometido masacres, homicidios, desapariciones forzadas, despojos, imposición de castigos, gravámenes ilegales; han asesinado adultos mayores, miembros de las comunidades NARP., y LGTBIQ+. Han asesinado niños, jóvenes, Defensores de Derechos Humanos y Ambientales. Han exiliado a un grupo importante de amigos y amigas, y a todos nos tienen amenazados.
  3. Los ciclos de la violencia han llegado a partir de procesos violentos que mutan al Caribe Colombiano y a la Eco-Región. En la sierra Nevada de Santa Marta, entre el 2006 (desmovilización del Bloque Norte) y lo que va corrido del año, han pasado 13 estructuras tipo paramilitar que lo único que han hecho es ganar terrenos y afianzarse. Hoy el control de las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra, es alarmante y dominan desde Mingueo (la Guajira) hasta Ciénaga (Magdalena) y en ciudades como Santa Marta, en este año han cometido 130 homicidios. El impulso que alias 57 les dio a las AGC., en esta Eco-Región fue poderosa porque volvió a reunir a muchos de lo que estuvieron bajo el mando del Bloque Norte. Esto en términos de violencia se traduce en combates, el desplazamiento de 1000 campesinos de la vereda la Secreta, desapariciones forzadas; de hecho, desde hace 10 días venimos informando de la desaparición de 4 campesinos en San Pedro de la Sierra, el asesinato de 2 periodistas en Fundación y el homicidio de un líder comunitario en Santa Rita (Magdalena). Colegios en medio de grafitis de las AGC., profesores retenidos y algunos extorsionados y colegios que han tenido que cerrar o adelantar vacaciones por estar en medio de las balas.
  4. Hoy las AGC., tiene gente armada (muy bien armada y entrenada) con tropas en Palmor de la Sierra, en la Mesa, el Copey, Dibulla y Fonseca. Sostiene pugnas por las rentas criminales en Santa Marta, Ciénaga y Zona Bananera. Esta fuerza desmedida les permite incluso tener presencia en todos los municipios del departamento del Magdalena (en unos más que en otros) pero en todos, tener presencia y accionar, como lo hicieron con el pasado paro armado donde en el departamento del Magdalena se cometieron 4 homicidios, quema de vehículos y varios días de terror. Estos grupos paramilitares también irrumpen en los sitios sagrados desconociendo a las comunidades indígenas a quienes también vulneran e intimidan. Tienen el control en cascos urbanos donde imponen y modifican las dinámicas sociales. Horarios, precios, comportamientos, permisos y liderazgos y se erigen como autoridad sin que el Estado entre a resguardar.
  5. En la zona PDET., Sierra Nevada (Guajira) regresaron los secuestros, las masacres, el daño colectivo a las comunidades indígenas y zonas que están bajo el control de organizaciones como: la Segunda Marquetalia, el ELN., participación de los Pranes, bandas como la de los 80 y por supuesto las AGC. Mingueo reporta incremento en homicidios, lo mismo que Fonseca y San Juan del Cesar y sus ciudades principales Riohacha y Maicao, no hay un día en que no reporten homicidios.
  6. En la zona PDET., del Cesar masacraron tres jóvenes en la Jagua de Ibirico; y transitan y asesinan en el corredor de Pueblo Bello, la Paz y San Diego. En Manaure PDET, Serranía del Perijá, asesinaron a un exinspector de Policía de Albania. Pero el control se extiende a el Copey, Bosconia y María Angola y han convertido a Valledupar en un baño constante de sangre con el incremento de los homicidios.

En la Eco-Región Sierra Nevada y Serranía del Perijá los campesinos viven con temor, este conflicto se ha desplegado a las zonas urbanas donde el incremento de la violencia es desmedido. No queremos más compañeros asesinados. Hace una semana volvieron a asesinarnos un líder comunal y así hemos venido enterrando a nuestros líderes y viendo como destrozan procesos, familias y movimientos sociales y comunitarios. Por esto, como líderes, lideresas, defensoras y defensores elevamos a ustedes, honorables senadores que hacen parte de la Comisión de Paz y que impulsan modificaciones en la Ley 418, que se incluya la Eco-región: Sierra Nevada y Serranía del Perijá, como una prioridad; como parte de una de las zonas de especial atención que tendrá el gobierno, por el contexto histórico, por la sucesión y persistencia de la violencia, por  las condiciones estructurales de discriminación y marginación en la que se mantienen la mayoría de municipios que la integran,  porque el narcotráfico nos agobia y porque merecemos y necesitamos vivir en paz.

Queremos adicional a esto, que se ponga en consideración los siguientes puntos:

  1. Que se fomente la creación del Gabinete de Paz, conformado por los líderes y lideresas que están en este territorio, que lo han vivido, lo han sentido, lo han llorado y lo han caminado. Que lo conocen no solo físicamente, sino desde lo más profundo de sus particularidades. Gabinete en el que estén presente organizaciones sociales de los territorios: Pueblos Étnicos (negros, Afrocolombianos, indígenas y Rom, campesinos y comunidad LGTBIQ+. 
  2. Que este gabinete tenga participación y pueda articularse con las iniciativas de paz que puedan desarrollarse desde el Estado, los municipios, los distritos y las gobernaciones. Que tenga articulación directa con el Estado y con la Comisión de Paz. Esto implica que sea invitado a compartir los avances de trabajo y que sus avances sean incorporados dentro de la toma decisiones. 
  3. Que se dote de garantías en seguridad para que pueda avanzar en una propuesta de mesas de trabajos que estarán desarrollándose en los municipios con mayor incidencia en la Eco-región. Esto implica acompañamiento policivo, militar y de las instituciones del estado. Además de los gobiernos locales.
  4. Que la Comisión de Paz del Senado visite la Eco-Región Sierra Nevada de Santa Marta y Serranía del Perijá para que impulse y apoye el trabajo de las organizaciones sociales que trabajamos sin recursos y en medio de la presión constante y el asedio de las lógicas de la criminalidad.

Firman,

Equipo PDHAL y Lideres y lideresas de organizaciones sociales de la Eco-Región Sierra Nevada y Serranía del Perijá.